Pese a ser uno de los 3 grandes equipos de Portugal, tras Benfica y Oporto, los destinos de Sporting Club de Portugal, mas conocido como Sporting de Lisboa, y el Real Madrid se cruzaron por primera vez en competición oficial en 1994. Hasta entonces solo se habían enfrentado a comienzos del siglo pasado, con una visita hispana en 1913, un doble partido en diciembre de 1915 en Madrid y un amistoso disputado en el Jose Alvalade en 1967 donde empataron a 1 (Sanchis en propia puerta y Gento)
Tras una mala temporada, donde incluso llego a peligrar la clasificación para las competiciones europeas tras perder 5 de los últimos 8 partidos, la temporada 94-95 se planteaba con nuevas ilusiones tras el fichaje de Jorge Valdano como entrenador y las incorporaciones estelares del argentino Fernando Redondo y el cerebro del eterno rival, el danes Michael Laudrup. Con la mente puesta en las 3 competiciones, el 26 de Agosto se realizaba el sorteo de competiciones europeas en el hotel Noga Hilton de Ginebra. Para la Copa de la Uefa, torneo que jugaba el Real Madrid esa temporada, se estableció un sistema de grupos con cabezas de serie para sortear los emparejamientos. El Real Madrid se encontró enclavado en el grupo G junto a Cannes, Sporting de Lisboa, Charleroi, Tirol Innsbruck, Fenerbahce, Rapid Bucarest y Dinamo Tbilisi, equipos entre los cuales saldría el rival madridista. A excepción del conjunto luso, la designación de los grupos habia sido benevola para el Madrid ya que habia esquivado a conjuntos como la Juventus, Inter, Marsella, Dortmund, Napoles, etc... recordemos que en esas fechas la Copa de Europa solo la jugaba el Campeón de Liga por lo cual el resto de equipos se dividian entre la Recopa y la Copa de la Uefa. Finalmente el bombo deparo el rival mas duro del grupo: el Sporting de Lisboa.
El conjunto luso estaba entrenado por Carlos Queiroz, el que seria posteriormente entrenador madridista en la temporada 2003/04, que contaba en sus filas con una legión de extranjeros (Balakov, Iordanov, Juskoviac, Valckx, Vujacic, Naybet, Lemajic y el nigeriano Amounike) mientras que entre los nativos se encontraban Carlos Xabier, Oceano, Sa Pinto y un joven Luis Figo. Los madridistas por su parte declararon a coro la dureza del rival y el optimismo en superar la eliminatoria.
El partido de ida se disputo el 13 de septiembre y la previa estuvo marcada por unas declaraciones efectuadas por Ramón Mendoza en RNE y Telemadrid: "Nosotros nunca hablamos de ellos y su presidente se ha pasado el verano haciéndolo de nuestros presupuestos,por no hablar del maleducado dé su segundo entrenador[...] Tanto Cataluña como el Barcelona dan miedo a la gente[...] nosotros sólo tenemos una bandera, la de España y por ello se nos discrimina[...] Jordi Cruyff es un chico frágil[...] Esta es una ciudad enamorada de su equipo. El Barça es la quintaesencia de todas la reivindicaciones".
Desde Barcelona hubo contestaciones de todo tipo:
- Cruyff: "Jugué cinco años en España y solo gane una Liga, no teníamos un equipo tan malo[...] antes las Ligas se ganaban por decreto [...] mezclar otra vez la política y el deporte es vivir todavía en los tiempos pasados".
- Joan Gaspart: El señor Mendoza se ha apuntado a un carro equivocado y lo que tenemos que hacer entre todos es dejarle de lado. Un directivo de fútbol solo ha de hablar de lo deportivo.
- Mussoms (vicepresidente azulgrana): Mendoza tiene menopausia deportiva e intenta aprovechar un ambiente anticatalan que se esta respirando políticamente para hacer su propia guerra.
Desde el gobierno, por medio del Secretario de Estado para el Deporte, Rafael Cortes Elvira, también dialogo con Mendoza y le pidió que rectificara públicamente sus palabras. Sin embargo Mendoza no quiso hablar sobre esta conversación y tampoco se retracto públicamente llegando a decir que: a. «Lo único que he hecho ha sido responder a agresiones verbales, yo no he comenzado y creo que no he incitado á la violencia. He dicho verdades.
Tras la polémica, llego el deporte y a las 21:00 comenzó el partido con Buyo, Quique, Luis Enrique, Hierro, Milla, Sanchis, Dubovsky (Sandro 68'), Michel (Amavisca 46'), Zamorano, Laudrup y Martin Vazquez, por el lado blanco, y Lemajic, Nelson, Walckx, Oceano, Marco Aurelio, Bujacic, Figo, Peixe (Capucho 74'), Juskowiak, C.Xavier (Filipe 69') y Sa Pinto. Un gol de Martín Vázquez, a los 11 minutos del encuentro, fue la única vez que se movió el marcador, en un encuentro donde el Madrid tuvo muchas dificultades debido a la presión del equipo portugues y a los problemas que planteo durante todo el partido Luis Figo. La baja de Redondo, lesionado, se noto mucho en la creacción del juego madridista y tan solo la entrada de Sandro mejoro un poco a los locales. El resultado fue corto y visto lo visto se anticipaba que el partido de vuelta no iba a ser fácil.
Los jugadores madridistas celebran el gol de Martín Vázquez.
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