martes, 13 de junio de 2017

Aquel cartel del Real Madrid-Manchester de 1957

Ahora que el deporte de primer nivel esta globalizado, en parte por las tecnologías que se disponen para llevar a cualquier rincón del planeta los eventos, le puede parecer extraño a las nuevas generaciones de aficionados la forma en que antiguamente interactuaban los hinchas con clubes y jugadores. No hablamos de aquellos que viven en la misma ciudad que el equipo al que siguen, sino de aquellos que lo hacían allende incluso de sus fronteras. 

Vamos a irnos a las décadas de los 40 y 50, años en los cuales no estaba implantada la televisión como puede ser hoy en día, y las noticias que podían llegar al resto de continente eran a través la prensa escrita o de la radio. Eran años en que por ejemplo el boletín mensual que publicaba el Real Madrid enviaba varias copias a un quiosco de Alemania donde un aficionado madridista lo ponía a disposición de los emigrantes allí instalados. Hinchas que tuvieron que salir por diversas circunstancia de su país en pos de un futuro mejor y que no querían perder el contacto con el equipo que almacenaban en su corazón.  Años en los cuales llegaban cartas, que hoy en día se custodian en los archivos del club blanco, donde emigrantes españoles en Argentina, los llamados "gallegos", escribían al club blanco para felicitarle por la victoria obtenida ante la visita del Racing Club de Avellaneda, que mitigaba y alegraba su estancia en aquellas tierras. O casos como el hincha mexicano que envió 100$ para que fuera repartido entre los jugadores, tras una victoria del conjunto blanco. En resumen, otra manera acorde a la época, de entablar relación los aficionados con el club, que siempre era contestado por el club y en la medida de lo posible, con aquello que demandaban los hinchas. 

Con la aparición de las competiciones europeas, y sobre todo con el gran papel que desempeño el Real Madrid en aquellos años, ya sea en los despachos liderando su creación o en el césped obteniendo triunfos, el nombre del club obtuvo de mayor tirón y publicidad allende a los Pirineos. Esto llevó al publico, ya fueran seguidores del equipo o meros coleccionistas, a establecer contacto con las oficinas del club para lograr aquellos recuerdos que hicieran menos dolorosa la lejanía en la cual se encontraban o que completaran la colección emprendida. Hoy traemos el ejemplo de un hincha-coleccionista ingles que no dudo en escribir a las oficinas de la calle Valenzuela, recordemos que las oficinas madridistas no estuvieron en el Santiago Bernabeu hasta mediada la década de los 60, para intentar conseguir un ejemplar del poster oficial que anunciaba el partido de semifinales de Copa de Europa entre el Real Madrid y el Manchester United. La petición, pese a la lejanía, no quedo en saco roto y desde las oficinas del club se envío por correo el poster demandado así como una carta firmada por el propio gerente del club, Antonio Calderón. Como recuerdo de aquello os mostramos la carta de respuesta y el póster original, que enmarcado,  muestra el paso del tiempo tras 60 años.